La acción penal busca sancionar a aquellos que resulten responsables de la golpiza dada a tres gendarmes del Centro Penitenciario Femenino (CPF) de Rancagua mientras realizaba la custodia de las internas durante la visita.
Como un hecho grave calificó, el director regional(s) de Gendarmería, Leonardo Barrientos, las agresiones recibidas por funcionarias durante el desempeño de sus funciones. es por ello, que la mañana del 4 de octubre, junto al abogado de la dirección regional, Jaime Oda, presentaron una querella en contra de todos los que resulten responsables.
La querella criminal busca establecer los hechos ocurridos el 27 de octubre cuando la interna individualizada con las iniciales M.J.G.E., quien junto con miembros de su familia y durante el horario de visita comenzó a agredir a las funcionarias que la custodiaban.
Lo anterior ocurre porque las funcionarias de Gendarmería se percatan que la interna y su madre se encontraban en actitud sospechosa, por ello proceden a efectuar un registro corporal encontrando dentro de sus ropas un paquete que había sido entregado por alguno de sus familiares.
Fue en ese momento donde la interna, junto a sus familiares, empezó una pelea en la que se vieron afectadas tres gendarmes, quienes resultaron con lesiones leves.
Ante ello, el director regional(s), coronel Leonardo Barrientos, presentó una querella en contra de los individualizados, destacando que «la Institución no tolerará actos de violencia al interior de las unidades penales. Así como garantizamos la seguridad de los internos, tenemos la obligación de cuidar a nuestros funcionarios y funcionarias».