Obra Don Orione celebra 45 años en Rancagua

Obra Don Orione celebra 45 años en Rancagua

Con la asistencia de la primera dama Cecilia Morel y de todas las autoridades de la Región de O’Higgins, la Obra Don Orione celebró sus 45 años de existencia en la Región, la cual se inicia con la fundación del Pequeño Cottolengo, convirtiéndose en la primera institución sin fines de lucro de la región en recibir a personas con discapacidad profunda y severa.

Para el director de la obra, padre Àlvaro Olivares, “con la obra Cottolengo buscamos contribuir a la sociedad concientizando sobre el respeto de los derechos de los más vulnerables. En la actualidad atendemos a casi 200 residentes: niños(as), jóvenes y adultos con daños neurológicos irreversibles, donde la mayoría está en situación de abandono total de sus familias y que han ingresado al hogar por medida de protección, donde alcanzan su máximo desarrollo en un entorno espiritual, social y familiar”.

Los residentes del Cottolengo participan en una serie de actividades junto a la comunidad, que les permite ser parte de ellas y vincularse con los entornos de la obra. Los niños y jóvenes asisten al Colegio Fray Ave María; y junto al resto de los residentes también son parte de celebraciones religiosas, actividades de formación y recreativas tales como: Taller de Teatro, Taller de Folclor, Taller de deporte, Agrotalleres Betania, Salidas culturales (museos, teatro, zoológicos, etc.); además de vacaciones de verano en una residencia en El Tabo.

Las otras obras
​Sobre el colegio especial Fray Ave María

Fundada hace 20 años, el colegio especial está ubicado al interior del Pequeño Cottolengo de Rancagua, y nace como respuesta a la necesidad de educar a los niños, niñas y jóvenes del Centro. Posteriormente, se integra a estudiantes externos, de la misma ciudad de Rancagua, con discapacidad. Se entregan herramientas que permitan a niños, niñas, jóvenes y adultos con necesidades educativas permanentes, recibir una estimulación temprana y/o sensorial, adquirir competencias y habilidades artísticas, sociales y laborales en forma integral, con el fin de mejorar su calidad de vida e inclusión en la comunidad.

Sobre el Centro Esperanza
Nace el año 2000. Su labor se enfoca en acoger a niños, niñas y adolescentes y sus familias, entorno a la superación de las secuelas de sus vivencias traumáticas, como violencia intra-familiar, e incluso abuso sexual. Ha sido un proyecto colaborador de la Red Sename hasta marzo del 2014. A partir de junio del 2014, Centro Esperanza continúa de manera particular, manteniendo su labor con niños, niñas y adolescentes que han sufrido vulneraciones graves en sus derechos. Este centro realiza un acompañamiento a las víctimas y familias, a través de procesos de orientación, intervención y de activación de medidas que garanticen una protección efectiva. Actualmente atiende a 40 personas, pero en sus casi 20 años ha atendido más de 1.000 casos.